Pequeñas mentiras sin importancia (Les Petits Mouchoirs) es una comedia dramática francesa dirigida por Guillaume Canet en 2010. La película sigue a un grupo de amigos que, como cada año, se reúnen para pasar sus vacaciones en la casa de playa de uno de ellos, Max, un exitoso empresario hotelero. Sin embargo, este verano es diferente: antes de partir, uno de los miembros del grupo sufre un grave accidente en París, lo que pone en duda la continuidad del viaje. A pesar de la situación, los amigos deciden seguir adelante con sus planes, convencidos de que podrán disfrutar de su tiempo juntos como siempre.

Durante su estancia en la playa, las dinámicas del grupo comienzan a cambiar. Las tensiones ocultas, los secretos no confesados y las pequeñas mentiras que cada uno ha acumulado a lo largo de los años empiezan a salir a la luz. A medida que los días avanzan, los personajes se enfrentan a sus propias inseguridades, deseos y conflictos personales, lo que pone a prueba la solidez de sus relaciones. La película explora con sensibilidad y humor la complejidad de la amistad, el paso del tiempo y la manera en que las personas lidian con sus emociones y responsabilidades.

Con un reparto estelar que incluye a François Cluzet, Marion Cotillard, Benoît Magimel y Gilles Lellouche, Les Petits Mouchoirs ofrece una mirada íntima y conmovedora sobre la fragilidad de las relaciones humanas y la importancia de la honestidad emocional.